La revolución tecnológica transformó los eventos corporativos

Streaming, tarjetas virtuales y aplicaciones para móviles están entre la oferta de los avances que facilitan la ejecución de toda actividad grupal.

Hace rato que quedaron atrás el papelógrafo, los marcadores y la exhibición física de productos que forman parte de los eventos empresariales. Hoy la tecnología está presente en la planeación, el diseño y el desarrollo de los mismos y se ha vuelto imprescindible para obtener el impacto y los resultados esperados.

Así lo resume Natalia García Herrera, comunicadora organizacional especialista en realización de eventos empresariales, cuando dice que “no usar la tecnología puede ser, sin duda, un mal referente o una mala presentación para su empresa con las consecuencias que esto implica, tanto para su imagen corporativa como para la elección del cliente entre el abanico de competencias. Los eventos corporativos, con el empleo de las tecnologías, mejoran”, acota García.

Lo que se busca, es asegurar, es precisamente causar impacto entre los asistentes, pues los eventos empresariales son una vitrina especial de negocio y una solución de mercadeo para las corporaciones.

Por eso hoy casi que es una obligación emplear iluminación LED, pantallas digitales gigantes, códigos QR, tarjetas de visita electrónica y aplicaciones para teléfonos móviles, entre otros, en los certámenes que se organizan, ya sea la presentación o lanzamiento de un producto, congresos, foros o reuniones de una empresa.

Y las posibilidades son muchas. Van desde la generación de bases de datos virtuales hasta el envío de invitaciones y acreditaciones digitales, shows de imágenes, transmisiones en vivo y registros en medios electrónicos, pasando por el uso de robots.

Carolina Ordóñez, de Katering Blue, empresa que opera el centro de convenciones Gonzalo Jiménez de Quesada, en Bogotá, afirma que el uso de la tecnología sirve para crear experiencias interactivas y sensoriales, que a la postre son las que garantizan el éxito del evento, algo que, subraya, en ese escenario se logra de buena manera.

“Somos el único Centro de Convenciones de Bogotá con un gran salón de 1.365 metros cuadrados de área libre y seis metros de altura; tenemos las áreas ideales para utilizar herramientas tecnológicas como los drones para la toma de fotografías aéreas, hacer eventos que mezclen lo presencial con lo virtual, para hacer streaming y proyecciones con escaladores, registro digital y remoto, entre otros”, explica Ordóñez, quien agrega que la clave está en adaptarse a las necesidades del cliente y proponerle alternativas tecnológicas, para lo cual cuentan con alianzas estratégicas con proveedores que complementan la oferta que ellos tienen.

Entre las aplicaciones tecnológicas que hay disponibles en Colombia están holografías, suelos, escaparates y orquestas interactivas, pantalla de niebla, bienvenida virtual, video mapping y por supuesto pantallas digitales, efectos de sonido, shows de catering, robots y bienvenidas virtuales.